Vistas de página en total

miércoles, 18 de marzo de 2015

LATIDOS

No podía dormir. Se había acostado pronto pero el cansancio y los pensamientos no le daban tregua. Fue a la cocina y se calentó un tazón de leche, le echó dos puñados de cereales y se tumbó en el sofá a leer el correo. Su corazón latía con fuerza y no se podía concentrar. Se dio cuenta de que mucho peor que las lágrimas que inundaban sus ojos, eran las palabras que no conseguía hacer salir de su garganta. Respiró fuerte, fuerte y hondo. Pero no valió de nada. Se sentía miserable. Se levanto y cogió el Manual del Mesías. Hacía mucho que no lo abría y como siempre, practicó el ritual: serenarse y abrir una pagina al azar. " La mejor forma de rehuir las responsabilidades, consiste en decir: tengo responsabilidades". Volvió a cerrar el Manual. Se tumbó en el sofá y dejo que las palabras la ahogaran. Rg (Al pop corn. Agosto 2014.) 



Foto. Rg


No hay comentarios:

Publicar un comentario