Tu mirada me hace grande

“Necesito verte aquí. Tu mirada me hace grande”. Oía la canción entre sueños, eso significaba que el despertador había sonado, pero no quería levantarse. Se estiró sin abrir todavía los ojos y enterró la cara en la almohada. Intentaba recordar su olor, pero ya no quedaba nada….habían pasado muchos días y aunque al principio creía olerlo cada vez que se iba a dormir, ahora ya era un simple recuerdo…… La luz invadía la habitación y la pereza invadía su cuerpo, le extrañaba, le necesitaba; pero él estaba lejos, muy lejos. Doce mil kilómetros de distancia entre ambos eran suficientes para sentirse vacía.
Se imaginó su cuerpo cálido a su lado. Solo habían hecho el amor una vez, pero a ella le basto para querer que aquella única vez se convirtiera en la primera de muchas. Su mente se despertó a la vez que su cuerpo, empezó acariciándose la tripa, lenta, muy lentamente y dejo que sus manos acariciasen sus pechos imaginando que eran las manos fuertes de él. Se pellizco un pezón hasta hacerse daño y un quejido salió de su boca mientras imaginaba que era la boca y los dientes de él quien le mordía. Su mano se deslizó por su cuerpo y sus dedos llegaron a su clítoris, una sonrisa suave se dibujó en sus labios.
Pensó en él acariciándola suavemente por todo el cuerpo, besándola lento, muy lento, jugando con su lengua y se imaginó a si misma encima de él, mordiéndolo el cuello, chupándole, oliéndole. Necesitaba olerle como se huelen los animales, igual, de manera primitiva. Empezó a acariciarse el clítoris lentamente, estaba húmeda, excitada.
Se introdujo un dedo en la vagina como él le sugería siempre que hiciese, primero uno y luego otro, los sintió dentro y deseo que fuera su miembro el que estuviese dentro de ella. Siguió acariciándose el clítoris, movimientos circulares, lentos pero intensos, imaginaba que él estaba dentro de ella, grande, lleno, hinchado…… y su dedo corazón cada vez se movía con más intensidad y rapidez…… su cuerpo se iba tensando, las sensaciones salían de dentro, su cuerpo se tensaba cada vez más, se humedeció los labios a la vez que con su mano izquierda se acariciaba los pechos y ya no pudo más, un orgasmo recorrió su cuerpo como si un rayo la hubiese traspasado, jadeó y un último espasmo la recorrió a la vez que pensó en él…..
Suspiró relajada y tranquila. Igual doce mil kilómetros no era tanta distancia si podía imaginarlo y sentirlo con tanta intensidad. Sonrió y se levantó dispuesta a empezar un día más, completamente desnuda se calzo sus stilettos y se dirigió a la ducha sintiéndose una reina. “Necesito verte aquí. Tu mirada me hace grande”, la canción seguía sonando en su cabeza mientras el agua resbalaba por su cuerpo. Rg. (Al pop corn. Mayo de 2013)



Foto. Rg